La denominada Operación Lusitania se inició en junio de este año y tuvo como eje la detección de un torno industrial que había ingresado desde Perú. Según la ficha técnica, el equipo debía pesar 3.500 kilos, pero la documentación de exportación lo registraba con un peso de 4.000. Esa diferencia de 510 kilos correspondía a los ladrillos de cocaína que permanecían ocultos en su interior.
El torno fue despachado desde Argentina en mayo de 2025 y, tras un seguimiento encubierto, fue inspeccionado en España, donde se hallaron 444 paquetes de cocaína. En paralelo, se llevaron a cabo allanamientos simultáneos en Argentina y Europa, que derivaron en el secuestro de dinero, dispositivos electrónicos, documentación y en la captura de nueve integrantes de la organización criminal.
El operativo fue impulsado por el Departamento Federal de Investigaciones (DFI) de la Policía Federal Argentina, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) y las autoridades policiales españolas, con participación de fuerzas peruanas.
El secretario de Lucha contra el Narcotráfico y el Crimen Organizado, Martín Verrier, precisó que el valor estimado del cargamento en el mercado europeo asciende a unos 20 millones de euros. Además, advirtió sobre el contexto regional: “Estamos viendo un incremento en los intentos de traficar cocaína hacia los puertos del sur, producto del aumento de la producción en Colombia”.