– Doctor, ¿de qué se trató este congreso y cuál fue su relevancia?
El congreso es la fusión de dos grandes eventos: el de la Sociedad Latinoamericana de Ritmo Cardíaco (LAHRS) y el Congreso Argentino de Arritmias. LAHRS es una sociedad internacional que agrupa a los especialistas de toda Latinoamérica y que está asociada a las sociedades de Norteamérica, Europa y Asia-Pacífico, incluso con participación de China.
La unión de ambas reuniones convirtió a este encuentro en el evento de Electrofisiología más importante de habla hispana del mundo. Participaron alrededor de 90 conferencistas de distintos países —norteamericanos, europeos y latinoamericanos— con un nivel científico de excelencia.

– Su conferencia trató sobre arritmias ventriculares. ¿Podría explicar de qué se trata?
Las arritmias ventriculares son alteraciones del ritmo cardíaco que se originan en los ventrículos, las cavidades inferiores del corazón. A veces provocan palpitaciones o sensación de “salto” en el pecho; otras veces no dan síntomas, pero pueden causar fatiga o incluso insuficiencia cardíaca si se sostienen en el tiempo.
Hay cuadros benignos, pero también situaciones más graves que requieren un abordaje específico. Por eso es fundamental una evaluación individual y un diagnóstico preciso.
– En ese contexto, ¿cuándo está indicada la ablación?
La ablación por radiofrecuencia es un procedimiento curativo, mínimamente invasivo, que busca eliminar el foco eléctrico anómalo que genera la arritmia. Está indicada en pacientes que presentan síntomas o que ya muestran signos de daño cardíaco.
Durante la ablación se introducen finos catéteres desde la ingle hasta el corazón y, una vez localizado el origen del problema, se aplica energía —de calor o de frío extremo— para eliminar esa pequeña zona del tejido.
El objetivo es restablecer el ritmo normal del corazón y evitar que la arritmia reaparezca, especialmente en aquellos casos donde los medicamentos no resultan efectivos o provocan efectos adversos.
– ¿Cómo evolucionó la tecnología en este campo?
Muchísimo. Cada año se incorporan nuevos sistemas de navegación 3D, materiales más seguros y catéteres más finos, lo que aumenta la precisión y reduce los riesgos.
La tendencia de la medicina actual es hacia tratamientos menos invasivos y más personalizados, con tasas de éxito cada vez mayores. La tecnología, en ese sentido, ha sido un factor revolucionario para los pacientes con arritmias.
– ¿Cuáles son los síntomas que deberían motivar una consulta médica?
Dolor en el pecho sin causa aparente, mareos, desmayos o palpitaciones irregulares. Muchas veces se los minimiza, pero ante cualquier síntoma hay que consultar. No todos los casos son graves, pero la evaluación temprana permite descartar riesgos y tratar a tiempo.
– La cardiología argentina tiene una tradición reconocida en el mundo. ¿Seguimos siendo una referencia internacional?
Argentina ha tenido y tiene figuras de enorme prestigio internacional. El país mantiene una producción científica muy activa, aunque el contexto económico no siempre facilita el desarrollo.
Aun así, los profesionales argentinos son muy valorados por su formación y su capacidad técnica.
– ¿Qué conclusiones generales dejó este congreso?
Además de las novedades tecnológicas, el encuentro permitió evaluar resultados concretos de los distintos centros de investigación. Esa evidencia científica es lo que finalmente respalda la eficacia de los nuevos tratamientos y mejora la práctica médica.
También fue una oportunidad para reforzar vínculos profesionales y consolidar la presencia argentina en el escenario internacional.
De todas maneras, creo que el mensaje para el público es que se cuide el corazón, que se informe y consulte a tiempo. La medicina moderna ofrece tratamientos muy eficaces, pero su éxito depende de llegar antes de que aparezcan complicaciones.






