El regreso de Gustavo Cordera a los escenarios volvió a generar polémica. El músico, exvocalista de Bersuit Vergarabat, debió cancelar sus presentaciones previstas para este fin de semana en Paraná y San Francisco (Córdoba) luego de una serie de manifestaciones de agrupaciones feministas que se opusieron a sus shows y recordaron las declaraciones que en el 2016 lo alejaron de la banda y de la movida pública.
En Paraná, un grupo de militantes autoconvocadas se manifestó frente al Teatro Municipal de Paraná, donde el artista iba a tocar el viernes. Tras conocer la cancelación, la Asamblea Feminista MLTTN se expresó en redes sociales:
“Cuando supimos que el show se canceló festejamos, porque significa otro logro, el de saber que nuestra marea sigue viva y que volvimos a sacudir ese poder hegemónico. Que sepan que estamos organizades, para que el mundo sea un lugar menos hostil para nuestras infancias travitas, tortas y no binarias”.
La misma situación se repitió al día siguiente en San Francisco, Córdoba, donde Cordera tenía previsto presentarse en la disco Ibiza. Desde el local comunicaron por Instagram que el espectáculo se suspendió “sin previo aviso” por decisión de la producción y del representante del artista.
Paralelamente, colectivos feministas de la ciudad repudiaron su llegada y difundieron un comunicado en el que subrayaron:
“Mientras ellos se preocupan por llenar un teatro, nosotras lidiamos con la violencia cotidiana, las cuotas alimentarias impagas y la sobrecarga de los cuidados. No se trata de censura ni de cancelar a nadie, sino de exigir respeto y espacios libres de violencia y apología del abuso. El arte y la cultura no se manchan”, expresaron
Ante la repercusión, Cordera publicó un video en sus redes donde explicó su versión de los hechos:
“Paraná fue cancelado y no sabemos por quién. Tres días antes del concierto devolvieron las entradas. La verdad es que siento que no tenemos las garantías institucionales y legales para poder seguir tocando. Para protegernos nosotros y para protegerlos a ustedes decidí reprogramar todos los conciertos: el de San Francisco, el de Neuquén, el de Bahía Blanca, el de Caleta Olivia también. Y todos aceptaron”, señaló.
En tanto, el artista aclaró que por ahora solo mantiene en pie una fecha en Buenos Aires:
“Lo que sí se hace, porque es mi casa desde el año 92, es Obras, el 1º de noviembre. Ese va a ser un espacio donde vamos a poner toda la energía, todas las canciones, todo el amor que nos tenemos. En ese lugar nos haremos sentir”, aseguró.
Las cancelaciones vuelven a poner en el centro del debate la figura de Cordera, quien intenta retomar su carrera mientras enfrenta el rechazo de sectores que aún recuerdan sus polémicas declaraciones en el 2016, cuando durante una charla con estudiantes de la escuela de periodismo TEA Arte en Buenos Aires, dijo – «hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo”. Frase que le valió la expulsión de la banda Bersuit Vergarabat y el repudio generalizado de la sociedad.