A partir de una denuncia por abuso de armas radicada el 12 de mayo, en la que una persona denunció haber sido víctima de disparos reiterados contra su vivienda en la misma zona donde se había producido el secuestro de estupefacientes, la causa adquirió nuevas dimensiones. En el procedimiento correspondiente a ese hecho se incautaron cinco armas de fuego y una cantidad no especificada de clorhidrato de cocaína.
Frente a nuevos episodios de intimidación y amenazas registrados el 21 de mayo, la fiscalía dispuso la realización de nuevos allanamientos que permitieron profundizar las líneas investigativas. En ese marco, este lunes fue detenido Javier Germán Benítez, de 37 años, quien ya registra antecedentes penales por lesiones graves. Según se informó, Benítez habría experimentado en la última década un significativo incremento de su patrimonio, en paralelo a actividades vinculadas a la compra y venta de chatarra y cartón.
Los procedimientos se realizaron en distintos domicilios de la ciudad y en zonas rurales. En calle Nora Quintana y Repetto (barrio El Silencio) se incautaron ocho teléfonos celulares; en la intersección de calles V. Cáceres y J. Duarte se secuestraron otros dos dispositivos; en Córdoba y calle Pública, tres más; en una finca de calle Marina Sol (Colonia Ayuí, a 4 km al oeste), se incautaron cinco celulares y cuatro municiones de arma de fuego; en Teniente Ibáñez 994 se retuvieron tres celulares adicionales, y en un establecimiento ubicado sobre Ruta 4, presuntamente propiedad de otro empresario del rubro, se secuestró un teléfono móvil.
El procedimiento central se llevó a cabo en un galpón de acopio de chatarra y cartón ubicado en el kilómetro 243 de la Autovía Gervasio Artigas. Allí se procedió a la aprehensión de Javier Germán Benítez y de su hermano, Luis Germán Benítez, de 35 años. Durante la diligencia se incautó un arma de fuego calibre 9 mm marca Bersa TRP 9, cargadores con proyectiles de distintos calibres (9 mm, .32 y .380), un revólver calibre .32 largo marca Military, y un total superior a 90 cartuchos. También se secuestraron tres teléfonos celulares.
Ambos fueron aprehendidos por el supuesto delito de tenencia ilegal de armas de fuego, y se evalúa su posible vinculación con los hechos previos investigados, en el marco de una causa en la que se entrecruzan delitos de tráfico de estupefacientes, delitos contra la salud pública, amenazas calificadas y presunto lavado de activos.
Las actuaciones fueron encabezadas por personal de la Comisaría Séptima, bajo la conducción del comisario David Ortíz y el segundo jefe Guillermo Almirón, con intervención del fiscal Mario Figueroa.
Fuente: Con información de Concordia Policiales