La actividad fue convocada por el Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf), y contó con la participación de autoridades provinciales, representantes de los tres poderes del Estado, organismos de protección, salud, educación y justicia, así como del Observatorio de Género y Primera Infancia de Vicegobernación.
“El protocolo es una herramienta fundamental que nos permite actuar con responsabilidad, compromiso y una mirada integral. Es imprescindible fortalecer su implementación en todo el territorio y asegurar que los equipos cuenten con la capacitación y el respaldo institucional necesario”, expresó Silvia Urruzola, vicepresidenta del Copnaf.
Durante la jornada se ratificó el compromiso de trabajar desde un enfoque interinstitucional e interdisciplinario, con el fin de garantizar el resguardo de los derechos de las víctimas y evitar su revictimización. La revisión del protocolo busca integrar avances normativos, actualizar los procedimientos internos de cada organismo e incorporar nuevos criterios y definiciones conceptuales.
Uno de los aspectos centrales abordados fue la necesidad de adaptar el protocolo a los desafíos contemporáneos, entre ellos, las nuevas formas de violencia ejercidas en entornos digitales.
El proceso de revisión apunta a construir consensos entre los organismos participantes, clarificar competencias y mejorar la articulación entre las instituciones. La iniciativa representa un paso clave hacia una política pública más eficaz en la prevención, detección y atención de situaciones de abuso sexual en la infancia y adolescencia.