El proyecto que propone modificar el huso horario en todo el país, impulsado por el diputado Julio Cobos (UCR), prevé retrasar los relojes una hora durante el período invernal, pasando del actual UTC -3 al UTC -4, lo que adelantaría los amaneceres y los atardeceres en comparación con el horario actual.
Según Cobos, la medida apunta a sincronizar la hora oficial con la hora solar, optimizando la exposición a la luz natural y, con ello, el rendimiento escolar, laboral y el consumo de energía. La discusión ahora pasa al Senado, que decidirá si la ley entra en vigencia o no.
Cómo funcionaría el nuevo esquema
De aprobarse, los argentinos atrasarían sus relojes el 1 de abril de 2026, y los adelantarían nuevamente en septiembre. La propuesta se inspira en la historia de los husos horarios en Argentina: en 1920 el país adoptó UTC -4, aunque con el tiempo se mantuvo por error UTC -3, tras abandonar en 1970 la alternancia con el horario de verano.
El proyecto sostiene que esta diferencia entre hora oficial y hora solar genera un “jetlag social” que impacta en la salud, en la productividad y en el consumo de electricidad. Ajustar el huso horario, argumenta, permitiría aprovechar mejor la energía solar, fomentando además un uso más eficiente de recursos renovables.
Opiniones de especialistas
Andrea Pattini, investigadora del Conicet, explica que la hora solar se determina por la posición del Sol en el cielo y que Argentina no está alineada con su meridiano correspondiente. Esto provoca descompensación horaria y obliga a encender luz artificial en las primeras horas del día, afectando la eficiencia energética y el bienestar general.
Diego Golombek, también del Conicet, coincide en que el país debería pasar del huso -3 al -4, pero critica que el proyecto contemple alternancia de horarios entre invierno y verano. “Lo ideal sería mantener UTC -4 todo el año, sin cambios estacionales, como se hace en muchos países”, señaló.
Con la media sanción en Diputados, el proyecto podría implementarse en 2026, marcando un significativo ajuste en los horarios cotidianos, en pos de un mejor equilibrio entre la luz natural y las actividades diurnas en todo el territorio nacional