Un grupo tomó por la fuerza la sede del Sindicato de la Fruta: conflicto interno y versiones cruzadas en un clima de tensión
El Secretario General del Sindicato de Obreros de la Fruta de Entre Ríos y Corrientes, Alcides Camejo, presentó hace instantes una denuncia policial ante la Jefatura de Policía Departamental de Concordia por la usurpación de la sede gremial ubicada en Saavedra N° 121. Un grupo de personas encabezadas por Cristian Iván Amaro -condenado en 2016 por el intento de homicidio del ex diputado Alejandro Bahler- y el abogado Alejandro Jacobi, ingresaron a la sede, rompiendo la cerradura y el candado, con el objetivo de avanzar en la “normalización institucional” del sindicato. Evocaron una decisión de la Federación Argentina de Trabajadores Rurales, Estibadores y Frutihortícolas Unidos (FATREFU) de intervenir el SOF.

Según el escrito, la denuncia se originó a partir de la información brindada por el tesorero del sindicato, Walter Rodrigo Monzón, quien advirtió que en redes sociales circulaban publicaciones sobre personas que ingresaban al edificio sin autorización. Camejo, acompañado de su asesor legal, Daniel Cedro, y de la junta directiva completa, se acercó a la sede para constatar la situación.
Al llegar, el personal policial presente explicó que quienes ingresaron al lugar habían dañado el candado y la cerradura, aunque se les permitió el acceso para “evitar disturbios mayores”.
Camejo señaló que las personas que usurparon la sede no eran socios ni trabajadores del sindicato y que los líderes de la acción fueron identificados como Jacobi Alejandro, Iván Amaro, Silvia Vega y Óscar Álvarez, acompañados por un grupo de aproximadamente 60 personas. También fueron mencionados como participantes Sebastián Sánchez, Julieta Godoy, Sotelo Eduardo y familiares de Castro.
El sindicalista solicitó la intervención de la justicia para que se retire del lugar a quienes no tienen vinculación con el sindicato y se asegure la protección del dinero, unos cinco cheques por un valor total de $6.000.000 y dinero en efectivo por aproximadamente $10.000.000, destinado al pago de aguinaldos de los empleados, la documentación y los equipos de computación.

