Según Femenia, después de un leve repunte al final de 2024 y principios de 2025, «el consumo se ha vuelto a desplomar comparado con las cifras de mayo del año anterior». Los comercios han implementado ofertas tentadoras de hasta un 50% en productos de temporada, así como facilidades de pago en cuotas, pero aun así, el comportamiento del consumidor no acompaña estas iniciativas.
«El problema radica en que por más que hagamos estas políticas de venta, la rentabilidad es escasa y los costos fijos crecen, sobre todo debido a las continuas actualizaciones tarifarias y la carga tributaria que siguen igual de pesadas», consideró.
Entre los puntos críticos que resalta Femenia, señala el golpe al poder adquisitivo de la población, base de la contracción agresiva en el consumo privado. «Una considerable parte de la sociedad argentina, aproximadamente el 50%, tiene serias dificultades para llegar a fin de mes, lo cual neutraliza los esfuerzos hechos desde el sector comercial, como ofrecer cuotas sin intereses o significativos descuentos», indicó.
En tanto, entre la variedad de factores que impactan a las pymes, como la creciente inflación y la presión de los costes fiscales, Femenia se mostró especialmente desencantado con el viraje en las políticas fiscales por parte del gobierno liderado por Milei. «El retorno del impuesto a las Ganancias, que había sido erradicado anteriormente, es ahora un nuevo peso sobre los salarios de miles de trabajadores, lo cual sólo contribuye a agravar la situación existente» denunció.
La Confederación, que representa a una gran parte del entramado económico argentino, sigue insistiendo en la necesidad de medidas urgentes para reducir la carga tributaria y avivar la demanda interna, dadas la condiciones exigentes por las que atraviesan. Según Femenia, el sector comercial «está trabajando al borde del colapso», y enfatiza la vital importancia de revitalizar el consumo privado para revertir el deterioro económico.