“En horas de la madrugada, un grupo de personas llega hasta ese sector y luego de subir unas escaleras, acceden a la planta alta y violentando una puerta, ingresan a una oficina. Luego de sustraer las cajas, caminan, las llevan en forma peatonal hasta un vehículo, las cargan en el mismo y se retiran del lugar”, indicó el subjefe a Radio Ciudadana (FM 89,7).

En las filmaciones se ven a personas con los rostros ocultos con bufandas, gorras y pasamontañas. «Prácticamente no se distingue su rostro”, admitió. De todas formas, los investigadores están realizando un relevamiento de cámaras en la vía pública para saber qué movimiento habían hecho antes del hecho.

Además, Bértoli dijo que había un dispositivo de alarma pero estaba cubierto por una bolsa. “Lo han cubierto al ingreso de la oficina”, indicó. El subcomisario confirmó que los perpetradores tuvieron alguna información precisa acerca de las medidas de seguridad existentes para moverse con tanta seguridad. “Prácticamente hay gente que mira otros detalles que nosotros no vemos y después terminan pasando información seguramente”, dijo.

Además, sostuvo que las oficinas donde se cometió el robo millonario no están a la vista de los playeros que estaban de turno en la estación en ese horario. “El personal atendiendo sus funciones no ve el movimiento que puede ocurrir en ese lugar de las oficinas. Más aún, en planta alta”, dijo.

Los dos vehículos utilizados para el robo, una VW Suran y un VW Bora, se dirigieron a la Autovía 14, a poca distancia de la estación. Por ello, solicitaron información a las camineras y las Departamentales de las ciudades vecinas para comenzar a recabar datos acerca del recorrido de los vehículos. Bértoli dijo que sabían hacia dónde se dirigieron, en referencia al sur o al norte, pero no quiso dar a conocer más detalles. “Les puedo decir que salieron de la ciudad pero lo otro me lo guardo”, dijo.

El subjefe además dijo que no conocía con exactitud el monto que se llevaron. Hay que hacer unos balances. “Hay unas versiones dando unas cifra disparatadas (se mencionaron $ 50 millones y US$ 800.000) pero en la Policía no hay informes de números hasta que se haga un balance”, indicó Bértoli.

El subjefe dijo que el robo es muy reciente. «Hay que analizar mucho, hay que ver, hay que estar horas sentado delante de un monitor mirando hasta el más mínimo detalle que nos pueda ser útil. Un segundo que uno desvíe la vista del monitor puede haber pasado un detalle. Es un trabajo muy duro; esperemos tener resultados”, remarcó.