El jueves de la semana pasada, mientras los trabajadores municipales de Obras Públicas se encontraban en asamblea, Mendoza quiso participar de la misma y fue expulsado por los agentes de seguridad. “Llegaron con una guardia privada, una guardia pretoriana y la fuerza pública de acá, de Gualeguaychú, a impedir el ingreso de un representante de los trabajadores”, mencionó.
Mendoza sostuvo que nunca pasó algo similar en esa ciudad pero tampoco había gobernado un intendente de la ultradecrecha “muy ligado” a la Secretaría General de la Presidencia, Karina Milei, y a los Menem, en referencia al presidente de la Cámara de Diputados y al asesor de la hermana presidencial, Martín y Eduardo respectivamente,
La movilización del lunes próximo se concentrará este lunes a las 9 en Rocamora y 25 de Mayo. Desde allí partirá hacia la Municipalidad para manifestarse en contra de las medidas adoptadas por la intendencia de Mauricio Davico.
“Estamos reclamando porqué no hay paritarias. Lo que hay es un acuerdo entre el sindicato mayoritario y el intendente donde solo se habla de la pauta salarial. En ATE quieren incluir otros temas en la conversación como los contratos, la planta permanente, la provisión de ropa de trabajo y las condiciones laborales”, destacó Mendoza.
Aunque, por un lado, el municipio comenzó a entregar la indumentaria de trabajo, por el otro han despedido a tres empleados del sector de obras públicas. Mendoza explicó que, desde el Ejecutivo, se alega que es la finalización de los contratos pero se trata de un eufemismo para no denominarlos por su nombre: “despidos encubiertos”. “Se tendrían que renovar pero como son hijos de compañeros que están trabajando ahí y están apoyando el conflicto, se les quita el contrato”, dijo.
Mendoza remarcó que ese es el comportamiento usual de las patronales cuando se manejan como “patrones de estancia”. El modus operandi es ejercer violencia laboral. “Hay muchos casos de violencia. El no recibirte, el ningunearte, el negar todo diálogo también es un tipo de violencia”. Asimismo, sostuvo que Davico se maneja con malas palabras a las que parece estar acostumbrados. A ATE los trató de “parásitos» además de mafia sindical.