Hasta ahí todo normal para Davico, de hecho, cuando fue intendente de Pueblo Belgrano vivió un incidente similar con un colaborador suyo, Luciano Garro, que hoy es su jefe de Gabinete. También un concejal de su riñón en aquella ciudad fue detenido en Corrientes transportando una importante carga de droga. Ninguno de aquellos eventos lo preocupó en aquel entonces, incluso cuando una radio local lo interrogó sobre su concejal narcotraficante, se permitió una risueña ironía manifestando que “no sabia sobre sus actividades en este tema, de hecho, me había comentado que iba a Misiones a traer ‘yerba’ (SIC)”. Y no solo ese incidente, su secretario de cultura, Luis Castillo también estuvo involucrado en un evento de alcoholemia.

En aquel entonces ninguna de estas situaciones lo preocuparon a Davico, ni tampoco lo movilizaron a tomar ninguna iniciativa política al respecto. Pero se ve que algo o alguien le han cambiado el chip, porque recientemente hizo declaraciones diciendo que era partidario de la pena de muerte para los traficantes de droga; y ahora pidió la expulsión del concejal Lesik porque hoy por hoy considera ‘intolerable’ que un funcionario público protagonice un evento como el señalado. Incluso su mano derecha en el municipio, Garro, enterado que finalmente el concejal chocador no fue expulsado del cuerpo, manifestó[i] que la no expulsión se debía a que “Son la Casta en su máxima expresión, los representantes de una línea de la UCR formalizaron una alianza con el kirchnerismo y con Guillermo Michel para lograr los votos y la permanencia del edil en el recinto”.

Toda esta situación significó, además, una colisión política frontal con la divisa que lo llevó al poder, incluida su vice intendenta, Julieta Carraza, puesta por el radicalismo.

Davico tampoco se anduvo con chicas, tirándose no solo contra los radicales locales sino contra las autoridades máximas provinciales de esta divisa: “La UCR de Benedetti y el Kirchnerismo le salvaron la banca al concejal que chocó con 1,87 de alcoholemia”, manifestó en sus redes sociales. Así actúa la CASTA POLÍTICA que soluciona sus problemas y te da la espalda a vos, al ciudadano que paga sus sueldos”. ¡Tomás tu torta!

Y no solo eso, ordenó la expulsión de Micaela Rodríguez, de Juntos por Entre Ríos, la alianza que lo llevó a ganar la intendencia. “Los concejales abajo firmantes, integrantes del bloque Juntos por Entre Ríos, nos dirigimos a usted a fin de comunicarle que la Sra. concejal Micaela Rodríguez ha sido expulsada de este Bloque ‘Juntos por Entre Ríos’”

Sintetizando:

 El actual intendente llegó al poder acompañado por un aluvión de votos que entre otras cosas le permitieron iniciar su gestión con una bancada de concejales propia, que reunía a 9 sobre un total de 13.

Hoy, en forma totalmente inesperada, por sus propias iniciativas, el oficialismo ha perdido la mayoría en el HCD. Lo que seguramente significará que su gestión de gobierno comenzará a transitar por senderos espinosos. Y lo más notable es que todo se inició por la iniciativa del intendente de pedir la expulsión de Lesik. Si no hubiera intervenido en el tema, como hizo anteriormente en circunstancias similares, todo seguiría como antes y el podría seguir gobernando la ciudad con la mayoría parlamentaria que acaba de perder.