A pesar de que el voto fue nominal -tal como lo propuso la Lista 1 pensando que de esa forma se podía reducir la diferencia a priori en favor de ampliar la alianza- el resultado fue igual de contundente. De los congresales de Concordia, sólo cinco se opusieron a la alianza con LLA: Elsa Sanabria,  Julio Greco, Susana Romero, Ricardo Gimenez y Luis Sciamarella. En tanto, 16 estuvieron a favor de la alianza con La Libertad Avanza: Juan Ramón Sansó de La Lamadrid, Luciano Dell’Ollio, Bernardo Ignacio Salduna, María Lorena Aguilar, Analía Cardoso, Mauricio Rey, María Luisa Pereyra, Celeste Fuscado, Zulma Rivarola, Horacio Cortina, Lucas Fuscado, Bernardita Reyes, Alfredo Fuscado, Luis López, Juan Antonio Retamar y Nora Pellenc (los últimos cinco congresales suplentes).

“Esto no es estar en contra de nadie, me parece que cada uno es responsable y yo aspiro que la UCR tenga protagonismo”, dijo. Greco recalcó que, más allá del resultado, en la UCR hay ideas que no se pueden dejar de lado. “Por más que las elecciones se pierdan, tenemos que darle contenido al partido, que es la causa principal por la que estoy afiliado. Y me parece que eso se desvirtúa y pierde contenido”.

Greco sostuvo que el radicalismo tiene una línea de pensamiento y no puede ser reemplazado por otra en vísperas de una elección  para renovar parcialmente la Cámara de Diputados y Senadores de la Nación. “Si uno piensa una cosa y después sale otra, es muy difícil con los afiliados y con la gente en general justificar cosas con  las que uno no está de acuerdo. Si me preguntan por qué hicieron esto o lo otro, me parece que hay que hacerse cargo después”.

El ex concejal dijo también que deben ser coherentes entre la conducta y el pensamiento. “Para seguir teniendo un rédito electoral, me parece que eso no tiene que ser así. No voy a aceptar cualquier cosa para tener un espacio de poder”, expresó.

Más adelante, Greco remarcó que no está en contra de dialogar con otros sectores. De hecho, sostuvo que se hizo una alianza con el PRO y remarcó que a la UCR no le fue bien. “Hay quienes dicen que sí pero es discutible. Para mí, no”. “Y esta segunda alianza es peor”, expresó. “Yo no puedo justificar que el Garrahan tenga problemas cuando lo inauguró Raúl Alfonsín en 1987. Me parece que es un hospital de excelencia para todo el país y no puedo estar en contra de eso”, remarcó.

Tampoco está  de acuerdo en que los jubilados no reciban un aumento de sus haberes y manifestó que se debe buscar una solución. Justamente, esta mañana se publicó en el Boletín Oficial el veto al incremento decidido por el Congreso. “Habrá que sacar de algún lado los recursos”, dijo. Para el médico, no hay argumentos valederos para que no haya una mejora del sector pasivo. “Dicen que no hay plata pero se hace una fiesta en Córdoba”, dijo en referencia al evento privado al que acudió Milei, “La Derecha Fest”, celebrado en la provincia mediterránea a fines de julio pasado.

Además, Greco dijo que jamás utilizó los insultos para dirigirse a un adversario político tal  el estilo del mandatario ultraderechista. “Hay que conversar, no puede ser todo agresión”.

A su vez, advirtió que el voto en contra de la alianza servía para preservar al partido y a la intendencia de Concordia que está en manos del radicalismo. “No sabemos cómo se van a desarrollar las cosas. La Argentina viene muy endeudada y no podemos fabular que todo va a ser maravilloso”.

Por último, Greco remarcó que la elección interna se mantiene en pie para el próximo domingo 10 de agosto. “Nosotros vamos por el bien común, más allá de las cosas que se puedan decir o de los errores que uno pueda tener. Uno hace política por el bien común, contrariamente a lo que todo el mundo puede presuponer: que se hace por ambiciones personales, por el poder, por plata”.

La línea dentro del partido alineada con Milei parece imparable. No obstante, hay sectores minoritarios que comenzaron a sembrar un debate al interior de la UCR. Aunque no alcanzaron a cambiar la historia, los cinco votos de los congresales de Concordia, dentro de los 82 de toda la provincia que se opusieron a la alianza con LLA, siguen planteando un interrogante que incomoda. ¿Que queda de la esencia del radicalismo’