Concretamente, modificará el valor del dólar para una serie de operaciones de comercio exterior y para la compra de dólares por parte de los ahorristas. Las medidas entrarán efecto desde este lunes.
El paquete tiene dos objetivos: incrementar las reservas del Banco Central y aumentar la recaudación fiscal. En ese sentido, en el gobierno esperan sumar unos U$S 2000 millones al BCRA y mejorar los ingresos fiscales en unos $ 1,3 billones de acá a fin de año.
De esta manera, el gobierno asegura que paliará los efectos económicos de la sequía, que se sintieron en menores exportaciones, menores ingresos tributarios y menor actividad. El FMI viene pidiendo políticas que refuercen ambos aspectos: reservas e ingresos fiscales.
Todo indica que estas medidas impactarán en el ritmo de la inflación ya que los empresarios trasladarán a sus precios los mayores costos de importación de bienes y servicios. En el gobierno creen que eso no debería suceder porque, dicen, las empresas ya hicieron un colchón financiero con la suba de los precios de los productos importados por encima de la devaluación del peso.
Además, asegura que aplicará en forma masiva un esquema de fiscalización que permite la trazabilidad, es decir el seguimiento simultáneo de las cientos de miles de operaciones comerciales diarias para conocer si hay aumentos de precios. La Afip recibe 1,4 millones de facturas diarias por operaciones comerciales.
Si la trazabilidad indica que los precios subieron por estas medidas, la Secretaría podría sancionar a la empresa impidiéndole el acceso al dólar oficial para realizar importaciones. Cabe recordar que esta medida se implementó desde la asunción de Sergio Massa y su actual equipo económico (Afip, Aduana, Secretaría de Comercio y Secretaría de Agricultura) aunque no parece que haya ralentizado el ritmo inflacionario ni el ritmo importador.
Las primeras señales desde la oposición política y el círculo rojo es que se está en presencia de una «devaluación encubierta» y una «suba de impuestos».
Las medidas
-El dólar para la importación de servicios subirá un 25%. Para esto, se aplicará el impuesto PAIS (el mismo que se paga por la compra de dólar ahorro) con una alícuota del 25%. No aplica si el importador paga la contratación con sus propios dólares.
Las excepciones son tres. Uno, la contratación de servicios de salud y educación del exterior estarán exentos de este aumento. Dos, la contratación de servicios turísticos y musicales seguirán pagando el 30% (los recitales no deberían subir sus precios ya de por sí muy elevados). Tres, los fletes contratados en el exterior, que tendrán un aumento del 7,5% en el valor del dólar.
-El dólar para la importación de bienes será un 7,5% más caro. Se aplicará el mismo impuesto PAIS a todas las importaciones de bienes, incluidas las que se hacen desde zonas francas y Tierra del Fuego.
En este caso, las excepciones son: en primer lugar, los insumos y bienes intermedios vinculados a la canasta básica alimentaria; los combustibles; los lubricantes y los bienes vinculados a la generación de energía, seguirán sin pagar el impuesto PAIS. En segundo lugar, los medicamentos y el material para combatir incendios, que estarán exentos por el artículo 36 de la Ley 27.541 (la de emergencia votada en diciembre de 2019). En tercer lugar, los bienes suntuarios, que seguirán pagando el 30%.
Esta suba del 7,5% en el valor del dólar para importación de bienes no afectará a las importaciones temporarias, que son las que se hacen para producir un bien que luego se exporta. El caso más conocido es el de la industria automotriz, que importa el 70% de las piezas que conforman un vehículo que luego exportan.
-Nuevo dólar agro. El gobierno establecerá en $ 340 el valor del dólar para las exportaciones de maíz y de dos docenas de productos agropecuarios vinculados a la actividad económica en las provincias (maní, arroz, algodón, etc). Estará vigente hasta el 31 de agosto.
-Sube el valor del dólar ahorro. Los 900 mil ahorristas que todos los mese compran 200 dólares para atesorar lo pagarán más caro desde este lunes ya que subirá la percepción del impuesto a las ganancias o a los bienes personales al 45% desde el 35% actual. Al valor del viernes último, implica una suba de $ 30 al pasar de $ 466,2 a $ 494,5
Fuente: Tiempo Argentino
confundido
Pero como, no era que esta gente nos prometió una Patria Justa, Libre y SOBERANA? Que no se iban a arrodillar ante el FMI a costa del hambre del pueblo, pero claro ahora los ciudadanos de a pie somos un poquito más pobres. Obvio que a lo planeros que saldrán a responder no les afecta, pues viven de la dadiva del trabajo de los demás. Ha, pero Macri…
Juan
Gracias peronismo, siempre pensando en los de abajo. Son tremendos. Explota todo. Soy un asalariado.