Desde el Gobierno Nacional se viene pregonando la Obra Pública cero y esa es una alternativa de altísimo riesgo. Es una medida posible, pero solo para generar un shock y resolver una coyuntura, en un brevísimo espacio de tiempo, pero que no puede eternizarse porque tendría consecuencias extremadamente graves y en muchos casos, irreversibles. Es imposible desconocer que todos los años nieva en la Patagonia, con mayor o menor intensidad, porque es un hecho indiscutible. Para eso, la Dirección Nacional de Vialidad organiza durante los meses del verano, las compras, adquisición de insumos, contrataciones, y alista a su personal para ejecutar el OPERATIVO INVERNAL.
LA PATAGONIA AL BORDE DEL COLAPSO
Desde el Gobierno Nacional se viene pregonando la Obra Pública cero y esa es una alternativa de altísimo riesgo.
Es una medida posible, pero solo para generar un shock y resolver una coyuntura, en un brevísimo espacio de tiempo, pero que no puede eternizarse porque tendría consecuencias extremadamente graves y en muchos casos, irreversibles.
Es imposible desconocer que todos los años nieva en la Patagonia, con mayor o menor intensidad, porque es un hecho indiscutible. Para eso, la Dirección Nacional de Vialidad organiza durante los meses del verano, las compras, adquisición de insumos, contrataciones, y alista a su personal para ejecutar el OPERATIVO INVERNAL.
Este operativo consiste en distribuir adecuadamente los equipos y el personal de la repartición, en lugares estratégicos, mayoritariamente desde la Provincia de Mendoza hasta la de Tierra del Fuego, para mantener los caminos despejados de nieve, evitar el hielo, retirar los desmoronamientos y deslaves que se producen por las copiosas lluvias y temporales que, incluye a los caminos cordilleranos y los pasos fronterizos de mayor tránsito vehicular y mayor desplazamiento de nuestras exportaciones e, incluso, el turismo interno y regional.
La realidad es que se ha hecho poco en el organismo y hoy nos encontramos con un atraso en la organización que es superior a los sesenta días. La Dirección Nacional de Vialidad debería tener un presupuesto anual que ronda entre los $500.000.000.000 a $700.000.000.000, y recién a fines de marzo se le han asignado solo $40.000.000.000.
Con esa cifra, Vialidad Nacional puede funcionar apenas un mes y medio a dos meses; y ya llevamos tres meses y medio de este período fiscal.
En la actualidad, los suelos de los caminos han empezado a congelarse y eso, hace muy dificultoso el trabajo de nuestras cuadrillas y equipos. Todavía no se han comprado los insumos necesarios, en cantidad suficiente, para realizar los trabajos de Operativo Invernal y ahora, estamos a merced de la benevolencia climática.
Si se producen algunas fuertes nevadas en este mes de abril o principios de mayo, no se podría despejar la nieve de los caminos, ni evitar el hielo, y los pasos fronterizos, pueblos y ciudades de la Patagonia quedarían bloqueados.
Esta es una tarea ciclópea que la Dirección Nacional de Vialidad realiza en conjunto con Gendarmería Nacional, Prefectura Naval Argentina, las policías provinciales jurisdiccionales, los organismos provinciales afines a la actividad y los municipios afectados.
Entendemos que el Gobierno Nacional ha iniciado su mandato hace tres meses, con inexperiencia en este tipo de eventos de características particularísimas y por ello, alertamos a las autoridades acerca de los riesgos potenciales de minimizar las consecuencias de no ejecutar adecuadamente el Operativo Invernal.
COMISION DIRECTIVA NACIONAL
Ing. José Raúl Rizzo