Simonetti sostuvo que hay mucha inseguridad en los trabajadores. “Acá estamos en una situación que las pymes están sufriendo con todo este tema del aumento de los servicios y se quieren achicar porque no hay ventas. Esto produce que la gente esté insegura. Están viendo que la cosa viene mal, que cobra de diferentes maneras porque la situación está mal”, remarcó.
“La parte de alimentación por ahí se mantiene”, dijo. No pasa lo mismo con los otros rubros existentes en el comercio. “Hay una realidad: la gente no tiene plata en el bolsillo y eso hace que las ventas hayan caído”, indicó.
Más adelante, destacó que la gente tenía un poder adquisitivo que le permitía poder realizar diferentes compras. Pero hoy se limita a los estrictamente necesario. “Ahora están usando la tarjeta para comprar alimentos y en cuotas. Cuando entras en esa… ir a comprar cualquier otra cosa, por ejemplo, electrodomésticos o una vestimenta, pasó a ser un privilegio. Apenas te alcanza para subsistir”, indico.
Desde el sindicato indicaron que intentan que no haya comerciantes que se aprovecen de la situación existente. Simonetti sostuvo que, exceptuando a los trabajadores que se encuentran en condiciones de informalidad, que interceden ante aquellos que están registrados pero sus empleadores les hacen complicada su permanencia.
Por ejemplo, mencionó que este mes correspondía el pago de una asignación de $ 40.000 extra a los salarios. Pero la gran mayoría de los comercios chicos no la pagan. Esa remuneración extra deriva del nuevo acuerdo paritario para los trabajadores de comercio que tiene vigencia desde el 1° de abril de 2024 hasta el 31 de marzo de 2026. Dentro de la misma, se definió una suma fija por única vez y no remunerativa de $ 40.000 a abonarse durante abril.
“Aprovechan la situación de bajas ventas para decirle a la gente ‘mira esto no va, no se vende, yo no te puedo pagar’ y ¿Qué hace el trabajador ante esa situación? Tiene que sostener a una familia. Agacha la cabeza y sigue. No queda otra manera porque si te vas del laburo no conseguís más trabajo”, indicó.
Por otra parte, recordó que el año pasado, la afluencia de uruguayos era un plus para la economía local ya que había consumo de parte de la gente. “Pero ahora los uruguayos no vienen más y el consumo se cayó estrepitosamente porque han licuado todos los salarios y las jubilaciones. Por eso estamos en la situación que estamos”, dijo.
Por último, Simonetti dijo que en el sindicato han vivido momentos mejores y peores. Pero no recuerda que haya pasado algo similar desde hace, por lo menos, dos décadas en adelante.
