En las vísperas del 22 de octubre, la obligación de mantener la unidad y la lealtad es innegable. Rara vez en una contienda electoral se han presentado de manera tan clara dos modelos de país en competencia. Esto es evidente, ya que el discurso neoliberal siempre se ha enmascarado con «buenas intenciones» y discursos hipócritas.
Hoy en día, los adversarios políticos expresan abiertamente sus posturas, vociferan, insultan y promueven su plataforma electoral sin tapujos. No tienen reparos en promover la vuelta a la estafa de las AFJP, la privatización de la educación y la salud pública, la reprivatización de Aerolíneas Argentinas, la eliminación de indemnizaciones para los trabajadores, el sacrificio del medio ambiente en favor de la «producción» y el extractivismo minero. Además, abandonarán cualquier reclamo por las Malvinas e Islas del Atlántico Sur, y en su política negacionista, reinstaurarán los retratos de los dictadores en la casa de gobierno y las instituciones.
En este contexto, la unidad y la lealtad se convierten en un deber, no en una opción. Con Massa, tenemos la oportunidad de liberarnos de las restricciones impuestas por el FMI, recuperar la soberanía política y la independencia económica, y retomar el camino de un modelo productivo en lugar de uno especulativo, garantizando la preservación de nuestros logros y derechos.
Con Massa a nivel nacional, Beto Bahl en la Provincia y Gay en la Ciudad, aseguramos una continuidad que nos permitirá finalmente salir del abismo en el que nos encontramos y romper las cadenas de la deuda impuestas por estos vendepatrias. Para lograrlo, necesitamos un pueblo unido, que reconozca verdaderamente a sus opresores. Tenemos las herramientas y la unidad necesarias. El pueblo unido jamás será vencido!!
Consejo Departamental del Partido Justicialista – Concordia