Director: Claudio Gastaldi | jueves 23 de enero de 2025
La poesía fue su trinchera contra la muerte, palomas que luchan, pañuelos que resisten. Aunque las palabras no hagan el amor, sino la ausencia, fueron refugio contra el dolor, las palabras hacen finalmente el amor y la esperanza. La muerte, agazapada parece triunfar, pero la batalla se renueva al infinito. El hilo del odio, el…
Sergio Brodsky
Calculá el consumo de luz del aire acondicionado
26 Sep 08:44
Por: Sergio Brodsky
Nunca es Muda la Muerte
La poesía fue su trinchera contra la muerte, palomas que luchan, pañuelos que resisten. Aunque las palabras no hagan el amor, sino la ausencia, fueron refugio contra el dolor, las palabras hacen finalmente el amor y la esperanza. La muerte, agazapada parece triunfar, pero la batalla se renueva al infinito. El hilo del odio, el mal y la muerte atravesó en silencio, o en gemidos de dolor y de idish a Flora Alejandra Pizarnik, cuando aún era presa del lenguaje. Absorbió en los gestos dolorosos de sus padres, en su infancia, la pesadumbre infinita del horror, la muerte de sus tíos, atrapados en el infierno del nazismo, en los vertederos del mal absoluto de los campos de concentración. La culpa, tal vez, de haber podido huir, de salvarse, de sufrir en silencio, en la tierra más ajena.
+ Ver comentarios
23 Jul 10:36
Por: Sergio Brodsky
«Palabras para vivir»: Breve historia de Tabita Peralta Lugones y tres generaciones marcadas por la tragedia
Esa frase, "necesité palabras para vivir" y para seguir viviendo, se la escuché decir a Tabita Peralta Lugones, creo que era en una entrevista televisiva. Tanto me impactó que "Palabras para vivir" (1) fue el título que elegí para el libro que, finalmente, la editorial "Panza verde" publicó en 2019, y el caso de Tabita es el que inaugura el análisis de cinco casos en los cuales la escritura creativa, y compartida sirve, amén de su valor literario, para salir del infierno, del suicidio, de la cárcel, de la prostitución o de la locura: el análisis de las obras de Goethe, César González, Elena Moncada y Schreber son su testimonio, en tan variados contextos de escritura. El ensayo pone a prueba la potente idea de Antonin Artaud: "No hay nadie que jamás haya escrito, pintado, esculpido, modelado, construido, inventado, a no ser para salir del infierno".