Silvia Abaca, periodista e integrante del Consejo Directivo del Llamamiento Argentino Judío (LAJ), expone las tensiones internas del judaísmo argentino y cuestiona la identificación entre judaísmo, sionismo y Estado de Israel. En diálogo con el programa Plural (Canal 4 Posadas), criticó al gobierno de Netanyahu, advirtió sobre el crecimiento del antisemitismo y la sobreactuación identitaria de Javier Milei.
En una columna cargada de denuncia geopolítica y crítica al doble estándar de las potencias occidentales, Monetta plantea que el conflicto entre Israel e Irán no es más que un nuevo capítulo de una guerra global silenciosa impulsada por intereses económicos, estratégicos y coloniales. Desde la expansión del sionismo hasta las operaciones encubiertas de espionaje, el analista sostiene que esta escalada bélica responde a un guion preestablecido por el poder imperial y mediático internacional.
En un contexto donde la libertad de expresión enfrenta crecientes tensiones, el procesamiento de la legisladora del Frente de Izquierda, Vanina Biasi, por publicaciones en redes sociales que critican al Estado de Israel, desata un debate sobre los límites del discurso político, la utilización de la Justicia como herramienta de silenciamiento y la delgada línea entre crítica ideológica y discriminación. El caso, en manos del juez Daniel Rafecas, reabre una discusión sensible que atraviesa derechos fundamentales, memoria histórica y tensiones geopolíticas.
Otra vez, el monstruo de la guerra se abate sobre Medio Oriente. Israel no acata el pacto en tres fases acordado con el gobierno palestino y desató una feroz ofensiva contra la población de la región de Gaza, a la que ya habían privado de agua y alimentos como una forma de exterminio planificado, matando hace pocas horas a más de 400 personas, mujeres y niños incluidos. Y que conste que también había informado a Washington de este ataque, haciéndolo cómplice a quien le cede las armas y bombas con las que masacran al pueblo palestino, con el pretexto de que no le restituyen los rehenes en manos de la milicia de Hamás. Y la pregunta es: ¿puede ser democrático un país que invade, coloniza y destruye a todo un pueblo originario en su hábitat natural durante siglos?
El capitalismo está mutando desde el dominio de la economía mundial hacia el interior de los países, ya sean centrales o no, pero que se encuentran sumidos en una crisis profunda debido a la implosión resultante de crisis acumuladas, especialmente desde 2008, que arrastró al mundo entero. El título de esta nota hace referencia a que el próximo canciller de la otrora poderosa Alemania será nada menos que un CEO de BlackRock, el fondo de inversión más grande del mundo, dirigido por el sionista Larry Fink.
La decisión histórica de la Corte Penal Internacional (CPI) de emitir órdenes de arresto contra los líderes del Gobierno de Israel, Benjamín Netanyahu, y su exministro de Defensa, Yoav Gallant, ha desatado indignación entre los líderes occidentales, quienes, durante décadas, han utilizado a este tribunal con sede en La Haya para avanzar en sus agendas políticas, orientándolas a su justificación.
En estos últimos días, el Estado de Israel ha infligido al Líbano un bombardeo masivo e indiscriminado, de tal manera que las víctimas civiles se cuentan por miles, sin que nadie en Occidente deje de mirar hacia otro lado, para no ser censurado o sancionado por su socio cómplice que es EE. UU.
Irán ha lanzado un ataque con al menos 240 misiles balísticos contra las ciudades de Tel Aviv y Jerusalén este martes, según informa el Ejército israelí. El ataque supone una escalada del conflicto en Oriente Medio, que ha empeorado significativamente en las últimas horas. Durante un discurso televisivo, el portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari, calificó el ataque como "serio", y prometió que "tendrá consecuencias". Un funcionario estadounidense había advertido de las "graves consecuencias" de un ataque iraní a Israel.
El pasado 18 de julio, tras el discurso del presidente de la AMIA, Amos Linetzky, en apoyo al genocidio del pueblo palestino y contra quienes se oponen a los crímenes del Estado de Israel contra Palestina, la Organización Sionista Argentina (OSA) y la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentina (DAIA) acusaron al periodista Alejandro Bercovich de “terrorista”. El ataque al comunicador contrastó con enormes muestras de solidaridad, en defensa de la libertad de expresión y en rechazo a los discursos que no sólo buscan justificar el genocidio palestino sino también desviar la mirada de la impunidad que recae sobre la investigación de los responsables del atentado a la AMIA.
La paz, tan ansiada y declarada como una necesidad mundial en el conflicto palestino-israelí, parece cada vez más lejana debido a la intransigencia del gobierno de Benjamín Netanyahu. Nadie recuerda el Derecho Internacional ni las verdaderas raíces del conflicto.