En la nota, las organizaciones aseguraron que se ven en la necesidad de solicitar una reunión de carácter urgente con el gobernador debido a que entienden que no fueron “del todo comprendidas las razones” por las cuales reclaman la relocalización del proyecto de instalación de una planta química de combustibles sintéticos frente a Colón, en las costas de la República Oriental del Uruguay. “Sabemos de su compromiso con este tema”, le señalaron.
Además, recalcaron que las últimas declaraciones de funcionarios del gobierno uruguayo que pudieron conocer vinculados a la toma de decisiones con respecto al proyecto presentado por HIF Global, donde manifiestan el cambio de layout de las instalaciones (modificación en la distribución física o el diseño interno de un espacio, planta o edificio, en especial en entornos industriales, logísticos o institucionales), sostuvieron que ven con “enorme preocupación e incertidumbre” que las condiciones de riesgo y vulnerabilidad a la que las comunidades del lado argentino del río se verán expuestas siguen latentes y se intensifican ante la falta de seriedad en las cuestiones técnicas que se dejan entrever por parte de la empresa.
Las distintas organizaciones sociales, políticas, gremiales y ambientales que confluyen en la multisectorial que se oponen a la instalación del complejo de combustible sintético frente a las costas de Colón, insisten en su relocalización. Recientemente se conoció que el proyecto de la empresa norteamericana HIF Global sigue en marcha con un nuevo diseño que ocupará menor espacio a lo ideado originalmente.
Esto resulta una cuestión de marketing, señalaron desde las entidades en un comunicado compartido con ERA Verde. “Este cambio de layout de la planta No Modifica las condiciones de riesgo y vulnerabilidad a la que Colón y la región, serán expuestas”, advirtieron el viernes pasado.
A través de la prensa, la multinacional HIF Global ratificó que el complejo de producción de e-combustibles en Paysandú se construirá frente a las playas de Colón. Pese a las señales que el gobierno uruguayo había dado para que se reubicara, tal como solicitan los vecinos entrerrianos, la idea que se echó a correr es que sólo tendrá un nuevo diseño que ocupará una superficie menor de la planeada en un primer momento y que no se modificará la inversión.
“Las modificaciones establecen el emplazamiento de la planta en el mismo padrón previsto frente a la ciudad de Colón, solamente que su ubicación se concentraría en el sector noreste de dicho predio. Al mismo tiempo, se precisa que en la etapa de construcción –estimada en aproximadamente 3 años de duración–, todos los componentes de la obra serán trasladados por río, dada su dimensión y peso, lo que impediría la utilización de caminos. Para ello se prevé la construcción de amarras especiales que permitirán el tráfico de barcazas frente a las playas de Colón”, apuntaron.
“Por todo esto, como Multisectorial Somos Ambiente y organizaciones firmantes, expresamos que esta propuesta de modificación, resulta extremadamente Insuficiente frente a los reclamos de Relocalización que venimos sosteniendo y fundamentando, desde hace varios meses, las poblaciones potencialmente afectadas y que, tanto autoridades del lado argentino, como del uruguayo consideraron válidas”, indicaron.
“Siguen latentes las condiciones de incertidumbre frente a situaciones negativas no previstas, ya que –reiteramos– no existe el riesgo cero dado el tipo de construcción, su continuo y permanente funcionamiento, las características de las sustancias a elaborar, y el volumen de producción (560.000 toneladas de metanol por año). Estando a poco más de 3.000 metros de Colón, y en un área aproximada a 10 km de la planta química, exponen a quienes habitamos la zona de forma permanente (aproximadamente 55.000 personas, cantidad que se duplica en período de verano) a situaciones de riesgo. Es oportuno señalar que la ciudad de Paysandú se encuentra a 12 km.”, precisaron.