De la inflación de septiembre 2023 que fue un 12,7% se desprende que la división con mayor aumento fue la de prendas de vestir y calzado con un 15,7%, principalmente impulsado por el cambio de temporada.
A este incremento se le sumó la dinámica de precios que obligó a los consumidores a optar por regalos más económicos. «Este resultado no generó sorpresa ya que la mayoría de los comercios esperaban una jornada tranquila», indicó la CAME.
En relación a lo que se esperaba vender, un 43% fue igual al año anterior, un 29% peor, seguido de un 24% mejor, un 2% mucho peor y un 1% mucho mejor.
Con la baja rentabilidad del comercio hubo poco margen para las promociones y apenas el 50% aplicó una.
En este contexto, el ticket promedio de venta fue del $ 20.529 que se ubica un 133% por encima del 2022, pero quedó debajo de la inflación anual que acumula un 138,3%.
¿A qué rubros afectó la caída de las ventas minoristas?
Cuatro de seis rubros relevados por la CAME registraron una caída interanual en sus ventas mientras que sólo dos crecieron: indumentaria con un 20% y calzado y marroquinería con un 9,8%.
En tanto, la mayor retracción fue para equipos periféricos, celulares y accesorios que disminuyeron un -13,1%, seguido de librería -9,6%, electrodomésticos, artefactos del hogar y equipos de audio -6,4%, y cosméticos y perfumería -0,9%.