En realidad, la intención inicial era realizar una manifestación hacia la Dirección Departamental de Escuelas. No obstante, esta mañana se habían reunido 30 personas y la mitad o más era el personal docente y algunos auxiliares. En una escuela de casi 185 alumnos, que hayan acudido solo una quincena de padres evidencia —más allá del mal tiempo y de quienes deben cumplir con sus obligaciones laborales en ese horario— que el desinterés en la educación pública se extiende horizontalmente en la sociedad. «Tenemos que ser más acá», se escuchaba entre las mismas madres. Además, desde la misma escuela les señalan que las respuestas de las autoridades solo llegarán en la medida en que los padres las exijan. Como muestra de ello, la vicedirectora de la escuela, Nancy Lizalde, indicó que lograron la limpieza del sótano gracias a la participación de los padres.
Entre quienes sí habían ido estaba Marisa Ibarrola, madre de un estudiante, quien sostuvo que desde hace más de un mes se les está solicitando a la Dirección Departamental de Escuelas y al Consejo General de Educación la reforma de la escuela. «Es inhabitable, cuando llueve prácticamente son charcos», expresó. Los alumnos no van los días de lluvia como en cualquier escuela. Pero lo que no sucede en las otras es que al día siguiente tampoco puedan acudir ya que las paredes están mojadas.
Además, hay humedad que genera problemas respiratorios entre los estudiantes y las docentes de igual modo. «Tienen que sacar licencia, no pueden venir a trabajar», dijo Ibarrola. En tanto, los estudiantes que se enferman dejan de ir a clases y pierden más días de escuela. La mujer se quejaba además de que desde la Dirección Departamental de Escuelas, en lugar de ponerse a trabajar para subsanar las falencias, envían a «apretar» a los directivos para que se trasladen adonde ellos le indican.
Ibarrola sostuvo que nadie se quiere ir de la escuela hasta que no comiencen los trabajos. Es que desconfían de que sus hijos deban ir a clases a lugares alejados (a los del turno mañana les ofrecieron la escuela secundaria «Erich Poenitz» ubicada a dos cuadras, pero a los de la tarde los envían a la primaria N° 14 «Coronel Navarro», ubicada en San Lorenzo y Villaguay a 2,5 km de distancia) y que no se mueva ni un ladrillo mientras tanto. De hecho, sostuvo que hace dos semanas les dijeron que en un mes comenzaba la obra y que ya tenía número de expediente, pero la semana pasada fueron y se encontraron con que no había número de expediente alguno. «Si no, lamentablemente quedamos que es un cuento», acotó.
Otra docente recordó que los reclamos por la situación del establecimiento escolar no son nuevos, sino que desde hace años los vienen demandando. La mujer remarcó que las falencias son estructurales y no se resuelven con «parches». «Vienen desde los cimientos», indicó. A su vez, explicó que no se niegan a trasladarse, pero primero quieren ver un número de expediente y obreros trabajando dentro de la escuela. «Ha pasado con otras escuelas que se han trasladado y han tenido que volver porque no comenzó nunca la obra», enfatizó.
Los alumnos no fueron a clases esta mañana. La escuela cuenta con siete aulas pero hay dos que fueron clausuradas por las filtraciones. Una de las que no se puede utilizar era destinada al primer grado. Quedan cinco aulas, pero son seis grados. La única solución que encontraron fue rotar a los chicos de primer grado por toda la escuela. Un día los de segundo grado se quedan en casa para cederles el aula a los de primero, al otro día tercero hace lo mismo y así sucesivamente.
Además, los chicos no pueden salir al patio interno los días de lluvia debido a que se moja por completo. Un domo de vidrio corredizo le falta un vidrio rectangular y por allí ingresa agua a raudales. Además, en la escuela creen que las ruedas del domo están oxidadas y por eso ya no corre. A su vez, la manivela que lo corría fue quitada y ya no hay forma de moverlo para que las aulas se sequen más rápido los días soleados. La humedad queda atrapada y las docentes, luego de un fin de semana de lluvia, encienden las luces y «saltan los tapones» y se quedan a oscuras. «Tenemos luz, pero no sabemos, con la humedad, cómo están y el peligro eléctrico que se corre», dijo la directora, Julieta Degani.
En el jardín, la parte más moderna de la escuela, las docentes señalan que se cayeron parcialmente los azulejos de una de las paredes de los baños.
No obstante, la escuela conoció tiempos mejores. En una de las aulas centrales, se había dispuesto una sala de computación. Colocaron canaletas de cable en medio de la habitación para las máquinas y hay un proyector en una de las paredes. Pero, ante la falta de espacio, debieron volver a utilizar esa habitación como un aula de grado.
En el segundo patio interno hay un aljibe, lo que evidencia la existencia de una cisterna, ya que la escuela es una casa antigua. Debajo de ese patio y de un aula lindera hay un sótano que se inunda. La vicedirectora recordó que la semana pasada vinieron con bombas a sacar el agua del sótano y la cisterna.

Pero esta mañana el agua que se filtra desde el techo se acumulaba nuevamente en el sótano, cuyo piso estaba cubierto por completo. La vicedirectora no se mostró favorable a que se rellenen ambos espacios subterráneos. «Son dos habitaciones enormes», dijo tal como se evidencia en el video publicado más abajo. En lugar de taparlos, quieren sellarlos para que no ingrese agua y restaurarlos. «Hacer un laboratorio, hacer una sala de video. No un aula permanente, sino algo que sea útil y beneficioso para la escuela más que clausurarlos», explicó.
Al terminar la asamblea, la directora indicó que el próximo viernes, a las 12, habrá una suspensión de clases para marchar hasta la municipalidad. «Los padres quieren que el intendente interceda ante este pedido», dijo. Además, Degani remarcó que los padres no están dispuestos a moverlos de la escuela hasta que no estén seguros de que las obras están a punto de iniciarse. Luego de la municipalidad se dirigirán hasta la Departamental de Escuelas. Es que el Director Departamental de Escuelas, Julio Barrios, no suele acudir o se presenta al día siguiente de que se realizan las asambleas de docentes y padres. Esta mañana, por ejemplo, no estuvo. «No vino nadie. Y están invitados siempre», explicó Degani. Por lo tanto, serán los padres quienes irán a ver el viernes a Barrios.
3 comentarios
Emilio B
hACE MESES SE VIENE RECLAMANDO ARREGLOS, NADIE VA DESDE EL GOBIERNO. SE QUE HAY MUCHO POR HACER, PERO PRESENTARSE Y HABLAR CON LA COMUNIDAD DEBERIA SER » YA». HAY PELIGRO EDILICIO.
Padre
consulta, las cooperadoras, en las escuelas no existen más. Nadie se arremanga, para colaborar con la sociedad comunidad, padres, madres, abuelos, Todo es el estado, que después critican, e insultan, una gran mayoría, evade impuestos (40/50%). Este país como otros, se hizo con el esfuerzo de sus pueblos, su gente, y sin intereses pecuniario, o solo por plata. Si no pensando en conjunto y por el bien de sus hijos y nietos. Hoy todo es el estado y solo platita, y pagar las gavelas, ha eso no.
El Gato Carlos
Los docentes kirchneristas manipulando a los padres y utilizando los niños para desestabilizar al gobernador.